Un año colosal, en cuanto a música se refiere, aunque dos género se destacan: el death y el black. Antes de dar inicio, enuncio las menciones de rigor:
Keyvanoth – Dam Society: Es un disco fascinante sin duda.
Woe – Hope Attriction: cuatro años de espera y un disco que cumple con las expectativas.
Soen – Lykaia: de lejos, es el mejor disco de la banda.
Violet Cold – Anomie: sin duda una anomalía en sí, es un disco fenomenal.
Recomendaciones a la boliviana
República Límite – La Unión es la Fuerza: aunque es un rock muy a lo boliviano, es un EP que suena bastante bien y augura algo prometedor.
Overcross – Prophecy: para mí, junto con Oscuro Mito, fue la banda revelación del Illimani Metal 2017.
Mazzone – Brutus: pese a un evidente problema de producción, es una de las propuestas más interesantes de la escena local.
Varios – Beast Over Bolivia: lo dije en su momento, es el mejor disco tributo a Maiden que he escuchado.
20. Cannibal Corpse – Red Before Black
Después años de haber caído en el conformismo y en la repetición, Cannibal al fin saca un disco relevante, tal vez el mejor desde el Vile. Creo que es la sorpresa del año, aunque es cierto también, que hace tiempo que dejé de seguir a la banda. El Gallery of Suicide, me pareció un disco tan malo que por mucho tiempo dejé de escuchar a Cannibal. El Torture me pareció un buen disco, pero no era nada del otro mundo. Pero aquí la cosa cambia por completo, suena increíblemente bien y fresco. Desde luego, la banda no está innovando en nada, pero este disco tiene un brillo particular y se sitúa entre lo mejor de su vasta e irregular discografía.
19. Cavalera Conspirancy – Psycosis
Cuarto disco de los legendarios hermanos Cavalera y la verdad es que esta banda crece con mucha fuerza, se expande en cada disco, aunque mi favorito sigue siendo el primero; pero el Pandemonium no se queda atrás, y este nuevo disco confirma la tendencia. Aquí hay algo muy sólido, la banda se aleja del legado Soulfly, en favor de un sonido más clásico que coquetea con la grandeza del Sepultura de principios de los 90. Y tal vez sea el disco más salvaje y violento que han producido hasta el momento.
18. Trivium – The Sin And the Sentence
Después de un par de discos mediocres y algo flojos, este nuevo esfuerzo es francamente demoledor. Es cierto, es demasiado mainstream, tiene sus toques poperos, pero eso no es necesariamente algo malo. Creo que muchas veces pensamos que el metal tiene que ser algo desconocido, subterráneo, algo que unos cuantos elegidos pueden escuchar y disfrutar. Es el elitismo natural hacia el cual tiende el género, nos sentimos superiores por escuchar música que muy pocos conocen. Pero también es perentorio reconocer, que es necesario salir de esa cápsula y explorar otros mundos. Trivium es una banda que me gusta, tiene una discografía muy variada y excelente y este disco tal vez sea el mejor. Es una banda madura, una banda que ha trabajado su sonido en estudio y en los escenarios, es el mejor ejemplo de lo que es metal contemporáneo.
17. Au-Dessus – End Chapter
Esta banda muestra muy bien cómo debe concebirse un álbum: como una sola pieza, una continuidad inquebrantable, de la cual no podemos escoger elementos sueltos, y creo que esa es la gran virtud de este disco. Es un inicio pero que cierra un ciclo, porque la banda está lista para llegar a otro nivel. Y esperemos que así sea, pues hay mucho potencial de por medio.
16. Cult of Erinyes – Tiberivs
Este es otro gran ejemplo, de cómo ha evolucionado el black en los años 2000, hasta convertirse en uno de los géneros más complejos y diversos del metal hoy en día. Y este disco, claramente si sitúa en ese espectro. Y esta es una banda que tiene mucho que ofrecer, tiene discos muy interesantes y ya tiene una sólida reputación en Europa, al ser una de las agrupaciones más interesantes del metal independiente.
15. Igorrr – Savage Sinusoid
Lo mencioné en su momento, esto es realmente salvaje, de los discos más extremos del año. Igorrr es una fuerza arrogante que combina diferentes estilos, siempre con la misma brutalidad.
14. Zeal and Ardor – Devil is Fine
Es uno de los discos más raros que he escuchado, es otra forma de concebir el black, mantiene las raíces oscuras de devoción satánica, pero lo combina con elementos propios de la cultura afro. Siendo una mezcla muy peculiar y bastante original.
13. Origine – Unparalleled Universe
De la misma manera, lo mencioné a medio año. Esta banda es tal vez, una de las más impresionantes en la nueva oleada del death, con su toque progresivo, pero sin perder la brutalidad característica. Muestra bien que el género puede evolucionar, adoptar nuevos elementos, llevando la destreza técnica a nuevos límites.
12. Mastodon – Emperor of Sand / Cold Dark Place
El Sebas hizo una excelente reseña del Emperor, vaticinando su reconciliación con la banda. El cambio es el principio rector del cosmos y sería ingenuo pensar que todo es plano y estático. El Hunter es un disco que rompe el sonido clásico de la banda, pero no es malo, es uno de los que más disfruto de hecho. El Emperor es un disco fenomenal, muy bien construido, muy sólido a nivel lírico. Y el 2017 la banda también sacó un EP, que suena maravillosamente bien y el único defecto que tiene, es su duración, es muy corto. Cómo no incluirlos, entre lo mejor del año.
11. Enslaved – E
Es cierto, el In Times, en muchos aspectos fue una decepción. En una banda que no suele decepcionar, realmente es una rareza y una anomalía. Enslaved es una banda que requiere un cierto ejercicio intelectual, lleva al límite las estructuras musicales y sin duda es una de las bandas más influyentes hoy en día. El E cumple a cabalidad con las expectativas, siendo un punto alto y destacado, en la notable discografía del grupo.
10. Obituary – Obituary
Otra de las grandes sorpresas del año; nunca lo voy a negar, esta es una de las bandas que cambió mi vida, pero me ha decepcionado bastante a lo largo de los años. Yo no esperaba nada. Tengo el disco, porque soy coleccionista y quedé muy sorprendido porque realmente es un muy buen disco. Con ello, queda claro que el 2017, fue el año del death.
9. Pallbearer – Heartless
Diez años, tres discos, dos EP y un demo, con ello esta es una de las bandas más relevantes de la escena contemporánea. Y cada disco, marca un viraje, es un sonido que se va construyendo y aquí las influencias progresivas son muy evidentes. Por ello, yo considero que este es el mejor, es un álbum muy bien logrado y creo que es el inicio de una etapa más osada, es un riesgo necesario. No hay peor castigo que caer en la morosidad.
8. Wode – Servants Of The Countercosmos
Después del death, siempre está el black, y este es una de las mejores placas del género. Con relación al anterior, creo que este álbum tiene un sonido más variado. Creo que está mejor construido. El disco epónimo fue salvaje y brutal, sin respiro alguno, la banda vuelve a sacar otro disco, de manera casi frenética, con otro enfoque. Lo reitero, el segundo álbum es más arriesgado, en algunos casos funciona, en otros no; aquí queda claro que la banda está en plena efervescencia creativa, aunque sacar un disco cada año es bastante arriesgado.
7. Amenra – Mass VI
Esta es una de las cosas más pesadas y oscuras del 2017, es una joya de disco y es una banda magnífica. Siempre nos enfrentamos a lo mismo: tenemos poco tiempo y me hubiera gustado escribir con más detalle mis impresiones sobre cada uno de estos discos, aunque siempre es difícil poner en palabras las sensaciones y es casi imposible describir con exactitud, el impacto que me provocó. Amenra tiene una sólida reputación, tiene un DVD, Live in Paris, que captura muy bien la fuerza indómita de la banda. Caótico, melódico, demencial, creo que son pilares, de toda esta música que escuchamos. Que causa curiosidad y aversión, pero no deja de ser un reflejo de lo que somos. Es la fuerza que alimenta el alma.
6. Venenum – Trance of Death
Disco debut, después del éxito inusitado del primer EP, esta placa se perfilaba muy bien y rebasa todas las expectativas, al ser una propuesta muy innovadora en el death, un género, acusado con demasiada frecuencia y con justa razón, de ser demasiado estático. Por eso este disco arrasa todo lo que sabíamos o todo lo que creíamos saber del death. Es un giro radical y necesario, siendo probablemente una de los opus magnus del género, el punto de partida de un nuevo ideario musical.
5. Persefone – Aathma
Esta es una banda que genera cierta controversia, no encaja muy bien en las categorías ya establecidas e introduce algo de blasfemia en el death, porque entra y sale de esa categoría constantemente. Yo creo que esta es una de las mejores bandas de metal progresivo de la escena actual, me han impresionado en más de una ocasión y este disco, confirma la impresión que me dio el Spiritual Migration, esto se enmarca en otro espectro musical, no siempre accesible pero absolutamente genial.
4. Pyrrhon – What Passes for Survival
A Pyrrhon nunca le importó ser accesible o llegar a un público más diverso, ellos tienen su propio universo musical, en el cual reinan sin ninguna complacencia. Si bien, hay un trasfondo death, esto no suena a nada conocido. Es lo que siempre me ha gustado de la música extrema, es como descender a las profundidades más oscuras y primigenias del ser humano, un viaje hacia la locura para toparnos con la bestia que mora en nuestro interior, aquella encadenada a la conciencia, el buen gusto, los buenos modales, la convivencia pacífica. El ser humano deslumbrado por su propia magnificencia, negando su esencia bestial, esa que aflora en los momentos de conflicto, en la frustración, en el acto de supervivencia. Comer o ser comido, así de simple es la existencia. Este disco es tremendo, probablemente el mejor disco de death de todo el 2017.
3. Ne Obliviscaris – Urn
Tercer disco de esta banda australiana, no puedo negar que soy un fan incondicional. Me gusta la forma como utilizan el violín, la manera como combinan lo melódico con la brutalidad más abyecta y me encanta cómo se complementan las voces. Creo que este disco no tuvo tanta repercusión como los dos anteriores, pero es igual de grandioso, se sitúa firmemente en mi espectro musical, es una de las bandas a las que recurro constantemente y siempre encuentro algo nuevo, siempre lo disfruto y lo escucho como si fuera la primera vez, descubriendo nuevos matices y pequeños detalles. Es un universo por sí mismo y espero que siguen con este ritmo.
2. Converge – The Dusk in Us
Nadie puede negar que esta es una de las bandas más impactantes de la escena. Ya veteranos y pioneros. El Jane Doe, es una obra maestra y este nuevo trabajo no se queda atrás, es sin duda uno de los discos más impactantes del 2017.
1. Krallice – Loüm/Go Be Forgotten
Krallice es la banda que lidera la vanguardia del metal extremo; no es una banda accesible, y me deja muy impresionado cada uno de sus discos. El 2017, a falta de uno tenemos dos, como el 2016. Pero el Prelapsarian, salió muy tarde y ya no entró en mi top de ese año, aunque es un trabajo muy sólido, como el resto de su discografía. En cuanto al 2017, los dos discos funcionan muy bien, y son muy diferentes entre sí, expresan toda la versatilidad de la banda y un ritmo frenético de trabajo que en ningún momento compromete la calidad del producto. Es la banda que ha reinventado el black, y por ello es lo mejor del año.
Si, gran año para el black y el death metal en definitiva. Compartimos algunos discos, que son nuestras bandas de cabecera, de ahí me interesa mucho oír el Cult of Erinyes, y retomar el Cagalera Conspiracy que la verdad no le di su tiempo.Abrazos
Que bien el Converge de número 2.
Ese Zeal and Ardor es una locura, ansío mucho verlos igual que a los Venenum. Me gustó el Au Dessus, ese de hecho lo seguiré escuchando y además definitivamente tengo que escuchar esos Krallice de nuevo. Que bien ver al Amenra!Por otro lado hay discos que intenté darles una escuchada durante el año pasado pero que no lograron quedarse en mi cabeza. Serás que bandas clásicas están retomando su status? Hay que ver que más traen no?
Gracias por su comentarios, el 2017 me enfoque en bandas clásicas, algo que no acontecía hace mucho tiempo. Sigo sostenido el Obituary es una barbaridad de disco, el mejor que tienen en años de decadencia, pudo haber sido disco del año. Y el Converge es una monstruosidad