Bohemian Rhapsody (2018)

Movie Poster

Como toda película biográfica, su estreno estuvo acompañado de un montón de críticas que señalaron de manera vehemente las inconsistencias históricas. En este mundo altamente mediático, es fácil olvidar la frontera que separa la ficción de la realidad y una película, sea cual sea, es ante todo una obra de ficción, toma licencias narrativas, pues su objetivo es contar una historia y no describir una realidad histórica, como lo haría un documental. Con eso en mente hay que evaluar la película como lo que es: un espectáculo visual y narrativo. Creo que cumple con su cometido y tiene la virtud de haber introducido a la banda a una nueva generación, que entusiasta fue a escuchar todo el catálogo musical disponible.

Yo crecí en los ochentas, un momento en el cual la escena musical estaba dominada por Michael Jackson, Madonna y Queen, la única banda de “rock” que podía rivalizar con el pop. Por eso mismo, nunca tuve mucho interés; la película Wayne’s World convirtió a Bohemian Rhapsody en una canción de culto. Hasta ese momento, el único recuerdo de Queen que tenía era el bigote de Mercury y el controvertido vídeo de I Want to Break Free. No sabía que la banda había grabado discos en los setentas. El 94, conseguí una copia del Greatest Hits del 81, y por muchos años fue el único disco de Queen que escuchaba de manera esporádica, pues en ese momento andaba buscando cosas más brutales y extremas.

Como anécdota, se incluyó en esta película la escena de Ray Foster, interpretado por Mike Myers, como una referencia explícita a la película Wayne’s World. Para la ahora icónica, escena del automóvil, Myers siempre quiso utilizar Bohemian Rhapsody, lo que no fue del completo agrado de los ejecutivos de NBC, que no veían ningún potencial en la canción, por ser larga y complicada. Myers amenazó con cancelar todos los planes, de no respetarse su visión artística. Como el estudio ya había invertido mucho dinero, accedieron. Fue un éxito rotundo y volvió a las listas de ventas, siendo considerada una de las mejores canciones jamás compuestas, arrogante y pomposa como todo el rock progresivo. Anécdota dos: la canción fue un éxito el 76, pero causó la repulsión de algunos críticos y de algunos chicos que preferían la crudeza de un rock más simple y directo, impulsando o atizando la oleada del punk, en un franco rechazo a todo el rock progresivo.

Queen 1974

La película tiene muchos problemas, es cierto, pero condensar tantos años de música y de desarrollo personal, en ciento treinta minutos, es toda una proeza en sí. Creo que la película tiene una muy buena progresión narrativa y a nivel visual está altamente detallada, recreando peinados, escenarios y vestimentas, sin mencionar la brillante actuación de Rami Malek. Siendo quisquillosos y melindrosos, la principal decepción para un fanático de Queen es haber dejado de lado la decisiva contribución de todos los miembros de la banda, pues queda claro en la cinta que el héroe y responsable de todo es Mercury. Un aspecto esencial en el sonido, es la guitarra de May, guitarra que él mismo fabricó y diseñó; es una historia fascinante en sí y existe un testimonio escrito de todo eso publicado el 2014. De la misma manera, Deacon diseñó y fabricó un amplificador, siendo el otro gran componente del peculiar sonido de Queen. Son dos aspectos narrativos muy interesantes, que muestran un aspecto poco explorado en cualquier enfoque: el lutier detrás de la música; los instrumentos son tan importantes como los intérpretes en sí.

Desde luego, la película sigue una trama demasiada usual, repetida hasta el cansancio: es el inadaptado que logra sobresalir pese a la adversidad, comete errores, paga por ello y tiene su momento de redención. Simplificando y agregando elementos dramáticos a la historia de la banda. Queen tenía problemas, choque de egos y rencillas internas, pero nunca se separaron. El 85 estaban en plena gira, Mercury lanza ese mismo año el Mr. Bad Guy, pero como un proyecto alterno, sin interferir con las obligaciones de la banda. Esas pequeñas licencias, irritaron a más de un fanático; sin embargo, permiten condensar la historia y le dan mucha fuerza a la escena final. Me sorprende la manera como recrearon, detalle por detalle, el concierto en el Live Aid. Un evento ambicioso y sin precedentes, pese a una cartelera impresionante, las reuniones esperadas de Led Zeppelin, Black Sabbath y The Who, fueron bastante decepcionantes. La presentación de Queen quedó para la posteridad, como una de las performances más impresionantes en la historia de la música y convierte a Mercury en un icono de la cultura pop. Pero la carrera de Queen no termina ahí.

Queen 1977

En la película es un momento intenso: la separación, el diagnóstico, la emotiva reunión y el apoteósico concierto. Desde luego, todos esos aspectos son ficticios, pero le dan fuerza a la película. Dos hitos que fueron totalmente obviados, es el legendario concierto en el Wembley el 86 y el, ya mítico concierto en Budapest. Pudo haber sido un final interesante también, pues Queen es una de las pocas bandas que tocó detrás de la cortina de hierro, siendo un concierto magnifico y que muestra todo el domino de Mercury sobre la audiencia; creo que eso merecería todo un comentario aparte. Pero ese concierto muestra como la música es realmente el lenguaje universal, derriba las barreras políticas, ideológicas y nacionales, por eso mismo ese concierto es tan fuerte y simbólico. Del drama personal a la reivindicación política, le habría dado otro significado a la película. No obstante, tal como está, funciona bien, cuenta una linda historia y quedé plenamente satisfecho. Desde luego, los puristas se rasgan las vestiduras, como los fanboys de Star Wars, ofendidos por elementos que escapan a mi entendimiento.

Todas las películas tienen inconsistencias históricas, comenzando por la celebérrima Apocalypse Now, pasando por la película de The Doors, la de Jimi Hendrix (que transitó desapercibida) o la del Miles Davis (que toma muchos riesgos a nivel narrativo). Tal vez el ejemplo más emblemático es el caso de Braveheart, entre el William Wallace de Mel Gibson y la figura histórica, muchas concordancias no hay, esa película es ficción pura. Lo mismo podemos decir de la Pasión de Cristo o Apocalyto, con sus obvias exageraciones. Lo demás, son cosas de gusto, no es fácil desarrollar muchos personajes, por eso la trama se centra en uno y es cierto, tampoco lo desarrolla a plenitud. Un aspecto controvertido y altamente criticado es la forma como la cinta recrea la vida amorosa del vocalista. En ningún momento se ve un romance, son asociaciones de interés, pero que dos hombres se besen en la pantalla, en una producción apta para todo público y abierta a todo tipo de audiencias, era algo totalmente impensable, hasta hace no mucho tiempo atrás.

Queen 1982

Desde los sectores ultra conservadores, se dice que el film hace una apología de la homosexualidad, siendo parte de ese complot neomarxista que comienza con la escuela de Frankfurt y cuya finalidad es derruir los pilares de la cultura occidental. Del lado ultra progresista, se dice que no es lo suficientemente gay. Desde luego, se pudo enfatizar en la relación entre Mercury y Jim Hutton, finalmente es el viudo y quien lo acompañó en sus últimos momentos. Cada quien lo interpreta a su manera; algunos dicen que la película presenta al SIDA como una forma de castigo divino a la vida promiscua de los homosexuales. Cuando estalló la epidemia, se la bautizó como la peste rosa, pues las comunidades homosexuales fueron las primeras en verse afectadas, lo que fue utilizado de manera mediática para alertar de los peligros de la homosexualidad, ahí nació todo ese delirio de la ideología de género (y de la supuesta dictadura que ahora nos acorrala), pues la ciencia mostraba lo aberrante de la condición homosexual.

El SIDA ataca a todos por igual, y la vía sexual no es la única fuente de contagio, de ahí el escándalo de la sangre contaminada en Francia. El SIDA marca el final de una época, de esa cultura de libertad, que surge en los 60, bajo la égida del ideal hippie, caemos en un conservadurismo hosco, que regresa por oleadas sucesivas y que plantea que la homosexualidad, es prácticamente un invento de la izquierda para generar simpatía y votantes, por lo menos esa es la tesis que manejan Nicolás Márquez y Agustín Laje, que publicaron un libro con bastante contenido ficticio, que es todo un éxito editorial en América Latina. Nos gustan las respuestas sencillas, es la base de todo éxito narrativo. Con todo, la película es una buena experiencia visual y musical, es recordar por qué Queen es una de las bandas más grandiosas en la historia del rock. Yo creo que el A Night at The Opera y A Day at The Races, son de las obras más impresionantes y complejas de la historia de la música. Ninguna otra banda tiene himnos tan universales como We Will Rock You o We Are The Champions que, a fuerza de ser utilizados a ultranza, pierden todo su contenido.

Es muy inusual que una película de estas características sea un éxito tan abrumador, el legado Queen no ha muerto y su recuerdo está más vivo que nunca. Solo por eso es digno de ser mencionado.

Queen 1986

Sobre George

Politólogo, melómano, escritor...

2 comentarios

  1. Nena George. Sandro

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *