Lo mejor de la primera mitad del año (2019)

Evolución. Creo que esta palabra define para mí, estos primeros seis meses del año. Meses en los que, por diversas razones, la evolución fue un concepto de uso casi cotidiano. La evolución de los organismos, de las sociedades, del individuo, del pensamiento, de la conciencia. Y también evolucionan las ideas, los conceptos, el arte y por supuesto la música.

Y detrás de toda esta evolución, hay toda una historia corta, mediana y de larga duración, plagada y articulada por innumerables coyunturas. Y ahí estamos nosotros, como testigos y observadores, pero también como actores y escudriñadores de toda esta larga historia. Afianzando nuestras identidades y pertenencias.

Así, a lo largo de todas estas madrugadas, han sido varios los discos que me han acompañado en todas estas cavilaciones, y pocos los que al final se han ido colando y ganando un lugar dentro de esta historia. Tal vez por eso, los discos que aquí les presento, tengan como común denominador un aire más introspectivo y meditabundo, discos que fluyen y te dejan ir. Por suerte para nosotros, la música nos une, nos mantiene vivos.

Y para finalizar … entonces … ¿La felicidad diaria y mundana es la que confirma nuestra honestidad existencial?

Tomorrowillbeworse – Hiraeth (Reino Unido)

Waste of Space Orchestra – Syntheosis (Finlandia)

Deathswarm – Shadowlands of darkness (Suecia)

Avalanche – Interstellar movement (Austria)

Noctambulist – Atmosphere of desolation (Estados Unidos)

Yeruselem – The sublime (Francia)

Thom Yorke – Anima (Inglaterra)

Warforged – I: Voice (Estados Unidos)

Yellow Eyes – Rare field Ceiling (Estados Unidos)

Ulver – Drone activity (Noruega)

Lo-Pan – Subtle (Estados Unidos)