El último disco de Hypocrisy, Worship, está brutal… pero hoy nos remontaremos al pasado. Si mal no recuerdo, descubrí a esta legendaria banda de death metal y el trabajo de Peter Tagtren allá por 1994, cuando conseguí una revista Kerrang! en la que promocionaban su disco Osculum Obscenum (lanzado a fines de 1993). Quedé intrigado por el arte, la descripción y el nombre del disco y, como era típico de la época, algún amigo terminó pasándome la grabación en un cassette que rememoro hasta estos días.
Por aquél entonces, llegaba a casa después del colegio a escuchar esta banda sueca a un volumen considerablemente alto. Siendo este disco oscuro y extremo, generaba como resultado bastante molestia y reprimendas por parte de mi abuela, tía abuela, madre y hermana, con quienes vivía bajo el mismo techo, y cuyos gustos musicales eran diametralmente opuestos a los míos, por supuesto. En esta ocasión, la ofrenda al Tío es para rememorar y honrar la paciencia de las cuatro, en especial aquellas tres que ya no están en el plano terrenal… cuántas veces las habré escuchado decir “¡esa tu música…!”, “¡Bajá tu volumen!”, etc. En fin, a la memoria de aquellas épocas y para el Tío: Pleasure of Molestation del Osculum Obscenum.