Obituary – Cause of Death Live Infection (2022)

Estados Unidos (Florida) – Death Metal (Relapse Records)

Ver a Obituary aquí en La Paz, fue una de las mejores experiencias de mi vida. Es ahí donde uno renueva lazos de lealtad con una banda y me recuerda porque me gustaba en un inicio. Es parte de mi formación musical, yo entré de cabeza a este mundillo con el death metal gringo; en Florida algo estaba aconteciendo, algo muy serio y cambió el sonido del metal para siempre. También es cierto que me distancio de algunas bandas y pasó lo mismo con Obituary, en el concierto recién me di cuenta lo importante que es para mí y para el death metal en general. En el top, el que publiqué hace algunos años, en el puesto número cinco debería estar el Cause of Death. Digan lo que digan, ninguna banda sonaba así y este año, salieron dos discos muy interesantes, ni bola les di. Son productos de la pandemia; es una forma de celebrar el legado y la emancipación de un género. Lo que resalta es la calidad del sonido, suena mucho mejor que las versiones originales; en aquel entonces fueron grabados con los medios del momento, treinta años después, es casi increíble el poder que tiene la banda y la voz de John Tardy, no puedo creer que siga cantando así, y lo vi en el escenario.

Esto es casi una reedición, pero no deja de ser una presentación en vivo, se siente ese elemento orgánico y la banda lo disfruta. No hay nada como verla en vivo, y sentir como vibran los instrumentos en tu cuerpo; no solo es el espectáculo, la pirotecnia y la puesta en escena, lo esencial es rockear junto con ellos. Podrían tocar en un cuartucho y yo estaría contento. El Cause of Death, definitivamente es uno de mis discos favoritos, uno de los primeros que compré, allá en un lejano 1994, es parte de mi vida y parte de lo que soy. Ahora tengo un renovado interés por la vida, me siento en paz, aunque ligeramente resfriado, es la consecuencia del concierto; pero me siento bien y no deja de ser irónico que lo haya provocado el death metal. La muerte nos fascina, nada más tétrico que contemplar un cuerpo putrefacto. En los noventa, eran usuales las revistas con contenido gore, esas noticias super amarillistas, “murió mientras defecaba” e ilustran el titular con la foto de un hombre obeso, sentando en un inodoro, en notorio estado de deterioro.

Infected

También recuerdo esos documentales, sobre las granjas de cadáveres, en los que se estudia los diferentes estados de la descomposición. No deja de ser impactante ver ese despojo, ese objeto que alguna vez fue humano, y ahora es un pedazo de carne expuesto a la inclemencia. Ese rostro contraído por el dolor, la carne negra e hinchada, y la mancha de los líquidos que el cuerpo va secretando. Pero una imagen no restituye el hedor; supongo que uno se habitúa, para aquellos que somos ajenos a ese mundo, es insoportable. Hay que tener estómago para ser forense, porque el olor es importante para establecer el tiempo estimado del deceso. No puedo ni siquiera concebirlo, y Obituary es eso, muerte, hedor, putrefacción. Aunque aquí la letra es un poco abstracta o cuando menos me cuesta interpretarla ¿Qué hay después de la muerte? Nunca tendremos una respuesta, solo buscamos un consuelo, una tumba sobre la cual llorar; nos aferramos a un recuerdo, glorificando la insignificancia de la vida. Pienso mucho en la muerte, pienso mucho en el suicidio; es un componente ineludible. La sobrecogedora presencia de la muerte; y la canción se construye de a poco, ruido ambiente, la percusión y luego la guitarra putrefacta. Son los últimos latidos, tus últimos instantes y en se momento, qué ocupará tus pensamientos. La canción va cobrando fuerza y cuando todo estalla es imposible contener el mosh.

Body Bag

Ken Andrews asume la primera guitarra y hace un excelente trabajo, me gusta más este tipo de producción. Cada instrumento está muy bien definido y goza de un espacio adecuado que nos permite apreciar detalles enterrados en la producción original. Me impresiona mucho la voz, es una técnica impecable y no ha envejecido en lo más mínimo. Los silencios son parte de la estructura musical, parece simple pero nada lo es. Me gusta mucho ese balance entre secciones super agresivas y otras en las cuales el fraseo lentamente se va construyendo, y por momentos está más cerca del rock clásico. Lo interesante en la voz, es la manera como la utiliza, presencia tenue y cuando irrumpe le agrega mucha textura a la canción. Creo que es la gran virtud, de estas primeras bandas de death metal, todas suena muy diferentes, aunque comparten tópicos comunes, cada una de ellas agrega un elemento en el desarrollo del género. Ningún vocalista suena así y ninguna banda sonaba de esta manera. En 1990, era una banda más, otro disco de metal extremo con sus cosas medias raras, es vanguardista en todo el sentido la palabra; ahora recién lo podemos valorar. Son pioneros, son parte de una oleada y lo cambio todo. De aquí brotaron géneros más extremos, más técnicos, más brutales; redefiniendo los límites de lo pesado. Y ese solo final es una bestialidad, es otro punto interesante, la manera con destaca la primera guitarra.

Chopped in Half

Mientras más lo escucho, más me intriga y queda bastante claro que suena diferente al estereotipo del death metal que todos tenemos anclado en el recuerdo. Hace bien volver a estos discos, es difícil creer que han pasado más de treinta años; son los cimientos de la brutalidad extrema. Yo era adolescente, en un momento en el cual el internet era un espacio sin censura, sin reglas; eran los tiempos de los foros y se compartían cosas que hoy hieren sensibilidades. El contenido sigue ahí, más discreto, hay que bajar a las profundidades, pero ahí está. Rotten, contenido gore, siempre enlazado con páginas pornográficas, y nunca pude entender esa peculiar asociación. Curiosidad mórbida. Esta canción retoma la temática común, lo interesante es que el contenido de las letras no tiene ni siquiera un semblante narrativo, están ahí como un adorno, porque la voz complementa a la música, es un instrumento más, y este es el único vocalista que logra ese efecto. Mientras rasguean con fuerza esas cuerdas, y estás de lleno metido en la canción, la voz surge de las entrañas mismas de la música; rompe con la estructura clásica: verso, refrán, verso. Hay largos momentos instrumentales, algo de por sí bastante inusual. Aquí no importan las atrocidades, o la descripción minuciosa de detalles obscenos, lo único que importa es la manera como modula el gruñido.

Circle of the Tyrants

Es bastante obvio, el black y el death tienen una raíz común, y en ese momento la diferencia no era tan tajante. Celtic Frost es otra piedra angular en todo esto; To Mega Therion, igual lo rompe todo, no tanto en la estructura, pero sí lo hace con el sonido. Hoy en día es casi impensable, concebir que una banda de death, haga un cover de una canción black. Recuerdo muy bien esa rivalidad ingenua, quién es más malvado; nosotros glorificamos la muerte, pero nosotros adoramos al diablo. Lo nuestro es real, es ideología, es acción, no son meras imágenes sacadas de una película de mala calidad, esto es real, es compromiso. No entendía nada de ese fanatismo, me veía seducido por esa aclamación del mal, pero el death era más ruidoso, era furia y prefiero ese tipo de entonación gutural. Después de todo es técnica, hay que aprender a respirar y entrenar las cuerdas vocales para soportar la tensión. Cantar así durante treinta años, sin lastimarte y sin perder la fuerza, requiere disciplina y es un trabajo constante; es en el escenario, en el esfuerzo de todos los días, donde uno aprender a medir los límites y uno encuentra una forma de gritar sin perder la voz. En 1997, la banda estaba exhausta, salir de gira no es solo fiesta todos los días, es viajar en condiciones no siempre muy confortables y dormir donde se pueda, comer lo que se pille. Dura es la vida de un músico, y dura es la vida en sí; es una batalla constante.

Dying

Esta una de mis canciones favoritas y creo que define mi adolescencia; ese fraseo colosal, esa la batería descomunal, ese bajo de fondo. Es la marcha hacia la victoria, aquí encontré la fuerza para seguir viviendo y enfrentarme a todos mis miedos. Banda sonadora de la vida, es la música que me da confianza. Es irónico, esto no es muerte, es vida y reclamo mi derecho a vivir y ser feliz. No me importa nada, y no tengo porque seguir el ejemplo de nadie, descargo mi ira en esa voz. Lo voy a decir cuántas veces sea necesario, es mi vocalista favorito. La canción tiene siete versos, pero la fuerza con la que canta es realmente única. Hay gente que ansía poder, posesiones, admiración y respeto; yo solo escribo, es todo lo que hago, es todo lo que puedo hacer, caigo en mi confort y no tengo por qué salir de él. Me deprimo como cualquier ser humano, porque todos tenemos que enfrentar momentos muy duros, es difícil sobreponerse al dolor. Escuchar música me pone de buen humor, y haberlo visto en vivo, es un logro en mi vida. Desde este lado del mundo no asistimos a muchos conciertos, si no fuera porque tenemos cocaína, tal vez la gente ni si quiera vendría. Pero aquí la cosa es de buena calidad y barata. Debería ser nuestro principal atractivo turístico, es nuestro producto estrella y el sostén de la economía nacional, por lo demás no hay medios, ni equipos ni salas de conciertos.

Find the Arise

Las canciones son cortas, pero efectivas; qué más se puede pedir. Sin embargo, no responden a una estructura simple, hay cambios muy notorios y por momentos, la brutalidad se sobrepone. No es fácil, lograr ese equilibrio; cualquiera puede redundar en la misma idea, o llenar el texto con detalles innecesarios. Lo más complicado es generar un impacto con muy pocos elementos, por eso la utilización de la voz me parece extraordinaria. Rompe moldes y convencionalismo. No necesariamente tengo que seguir el camino que todos recorren, es la virtud del arte; lo olvidamos con demasiada frecuencia, son las perversiones de la sociedad de consumo, en la cual todo ya está prefabricado. Ya ni siquiera es necesario que sepas cantar o tengas un mínimo de entrenamiento musical. Todos siguen el mismo formato, es lo que vende, es lo que está de moda, es lo que genera expectativa. Hay que fomentar aquello que pueda ser bueno para los negocios. Seamos felices consumiendo las misas cosas, venerando a los mismos ídolos, pensando que este es el mejor mundo posible, es el pináculo de la civilización y deberíamos estar agradecidos por las ofrendas que entregamos a los dioses. Sumisión y devoción, alabemos al mercado y a nuestros benévolos líderes que nos arrojan migajas. El metal siempre será un acto de rebelión.

Cause of Death

Es legendario, la esencia de la putrefacción en un rasgueo. Expiamos nuestras culpas en un rito de confraternización. Entramos en transe, nos dejamos llevar por la música, por esa voz que recita una antigua profecía. Necesitamos entender la causa de nuestras penurias. El sufrimiento eterno. La muerte. El suplicio. Por qué mi cuerpo se pudre si es la imagen del creador. Y sin embargo, la muerte es lo único que calma el dolor. Quisiera pensar que somos el único ser vivo que percibe a la muerte como una alternativa. Quisiera creer que somos lo suficientemente inteligente como para eludir cualquier designio. Me arrastro y me humillo, por un poco de comida, por una muestra de afecto, un reconocimiento tácito que me confiere el valor de sujeto. Estoy dispuesto a padecer los peores tormentos por mi fe, estoy dispuesto a morir por lo que creo, es el sacrificio; me entrego a la eternidad. Necesitamos una causa, un fundamento; requerimos respuestas, las exigimos, es simple lógica asociativa: hay un ser que guía mis pasos, un ser cruel y depravado que goza con mi sufrimiento, que necesita sangre y muerte para saciar su apetito. La causa de la muerte, es el hambre; tengo que comer, es el impulso de vida, necesito consumir a otro ser vivo. Somos el único ser que cría a otro con el único afán de comérselo. Tómenos un tiempo para asimilar el horror.

Memories Remain – Turned Inside Out 

Es la nostalgia, los rostros de la muerte, los noventa; esto era de las cosas más violentas y salvaje que había escuchado en mi vida y como suele suceder en estos casos, uno encuentra gente que te dice con cierta soberbia: ay no, cómo te va a gustar esa banda de mierda. Rivalidades hoscas y Obituary tiene lo que a mí me gusta, no tengo porque explicarlo o si quiera justificarlo, aunque podía ser motivo de discriminación: aquí somos de la iglesia de Entombed. La vida es solo un recuerdo, una historia mal contada, con muchas exageraciones, muchas imprecisiones, muchas afirmaciones sin sustento. La vida es sueño, la vida está en otra parte; pienso y quizás existo. Reacciones químicas que provocan sensaciones; tal vez es la voluntad omnipotente. Pienso demasiado, me pierdo en la música y es lo que le da sentido a mi vida; seguiré disfrutando estos pequeños placeres, de lo contrario, de qué sirve vivir. No estamos aquí para amargarnos, aunque es casi imposible salir del miasma, por lo menos seamos felices en la ignorancia, cierro mi puerta y que el mundo arda.

Como esto es un en vivo, no podían falta las canciones extras y por eso mismo esta es la mejor versión que tenemos de este disco. Es absolutamente genial y creo que era necesario, darle nueva vida, darle cierta relevancia. Hasta la portada es genial, de las mejores que hay. En este versión queda el ojo en primer plano, es la bestia hambrienta; si no eres presa, eres depredador, así de cruel es la existencia. 

Sobre George

Politólogo, melómano, escritor...

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