El año pasado empecé con mi lista de los discos más escuchados, que no era precisamente una lista de discos del año. Este 2023, me propuse dar continuidad a este proyecto. Este año que se nos va, fue duro, con muchos desafíos personales y muchas metas cumplidas. Un periodo de crecimiento y expansión.
Como siempre digo, la música es una cuestión de frecuencias y vibraciones, y este año, para no variar fue un año en el que el death metal marco mis tiempos. Simplemente te conectas con cierta música, ciertas vibras, con ciertos discos y todo fluye… la vida se te hace más sencilla…
Muchos de estos discos, son habituales, con otros me volví a conectar. Hacer este ejercicio resulta muy reconfortante, primero porque hace tiempo que no escribía y segundo, porque estos discos son una especie de reseñas cortas a manera de recomendaciones. Evidentemente, hay un hilo conductor en estos discos. Y bueno, sin orden de preferencia, aquí está la lista de los discos más escuchados este año … Keep on Rotting!!!
Alice in Chains – Dirt (1992)
Alice in Chains – Dirt (1992)
Este es un disco recurrente al que vuelvo una y otra vez. En él, ya era palpable la lucha interna de Layne Staley y del Mike Starr con su adicción a la heroína. El aura que tiene, es bien pesada, pero a la vez es emotiva y trata de buscar cierta redención. Hay muchas cosas que hacen especial a este disco. En general, es un disco melancólico. Una visión muy jodida de la vida y de las adiciones a las drogas, la pérdida de la voluntad y del sentido mismo de estar aquí. Posiblemente, lo que más resalta del disco, son los duetos vocales que se pegan el Layne y el Jerry Cantrell. Temones épicos, como la Rain when I die, Rooster, la Down in a hole o la Would?, son canciones que te ponen la piel de gallina. Es que estos dos tipos eran un complemento perfecto. Y tampoco olvidar al Sean Kinney, que es otro batero fuera de serie. Un discazo, posiblemente uno de los mejores discos del Grunge de Seattle de todos los tiempos.
Alkaloid – Liquid anatomy (2018)
Alkaloid – Liquid anatomy (2018)
En cierta manera, esta banda puede ser considerada como el lado B de Obscura. Después de abandonar la banda, Hannes Grossmann recluto una vez más a Christian Münzner (con quien ya había trabajado en Necrophagist y Obscura) y a Linus Klausenitzer (Obscura). Completa el line-up, Morean (Florian Magnus Maier), como vocal y guitarrista.
Este disco es una reunión de virtuosos. En realidad, el sonido, tiene mucho del death metal progresivo al que nos tiene acostumbrado Obscura, pero tiene nuevos elementos que provienen de la vena de Morean. Posiblemente, las voces limpias son el rasgo más sobresaliente. Y otra cosa que me llama profundamente la atención, la influencia palpable del rock progresivo de Yes, especialmente en la parte vocal, solo basta darle y una escuchada a la Kernel panic.
Un disco recomendado para todos aquellos que disfrutan de este tipo de death metal progresivo. Además, bajo el aura Lovecraftiana. Azagthoth ha despertado para devorar al universo conocido…
Atheist – Elements (1993)
Atheist – Elements (1993)
Este año, por diferentes motivos, he vuelto a las ciencias naturales, a la Biología y a las bases de la ecología; y en ese tránsito, me volví a encontrar con muchos de los discos que escuchaba en mi época de Biología en la U. Atheist era una banda obligatoria en esos tiempos y con el tiempo este disco se volvió en uno de mis discos de cabecera.
La historia de este disco es una de esas cosas raras que suceden. Un día a finales de 1992, Kelly Shaefer recibió una llamada de su sello, en la que le informaban que, de acuerdo al contrato, la banda tenía que presentar su trabajo en los próximos 40 días. El problema era ¡que no había banda!. Así que Shaefer se puso en contacto con un amigo, Frank Emmi y con otro viejo conocido, Tony Choy y con este núcleo empezaron a grabar los primeros demos. Pronto se les unió Randy Burkey que había abandonado Atheist y ahora volvía para ser parte de la banda una vez más. Contactaron con el baterista Josh Greebaum que dejo registradas algunas pistas, aunque el baterista que terminaría grabando las batas fue Marcell Dissantos. También aportó mucho en este disco, David Smadbeck con unas líneas de piano realmente memorables.
El asunto es que muchos de estos músicos de “sesión” provenían del mundo del latin jazz de Florida, lo que efectivamente le dio al disco un vibra totalmente diferente: Death metal progresivo con muchos elementos de jazz. Grabado en Gainsville, este debe ser unos de los discos más icónicos del Death metal de Florida de principios de los 90.
Lo anecdótico, es que pese a todo el esfuerzo, el material con el que contaban no cumplía con el tiempo mínimo requerido, así que a manera de relleno, cada uno de los miembros fueron grabando material de relleno que salió casi de manera natural de ese proceso de grabación, temas como Samba briza, Displacement, Fractal point, See you again, son ejemplo de ello. Y las letras, Shaefer fue escribiéndolas en el mismo estudio de grabación. El mismo cuenta que en algunos casos terminó de escribir algunas para entrar directamente a grabarlas. Lo interesante de las letras, es el enfoque “ecologista” que tienen y que le dan coherencia al disco. Un mensaje sobre la importancia de nuestra Madre Tierra y como el hombre se está encargando de depredarla.
En fin, uno de esos azares del destino. Alineación de planetas, una confabulación del cosmos y de eventos puntuales que se alinean una vez cada tantos años, para dar lugar a creaciones como esta. Un disco, ¡clásico del death metal!
Between the Buried and Me – Automata I (2018)
Between the Buried and Me – Automata I (2018)
Provenientes de Raleigh, Carolina del Norte, esta es una de las bandas que más me ha marcado en los últimos años. A este Automata I, lo pillé en uno de los periodos turbulentos de mi vida. Este es un viaje conceptual, después de los Parallax y del Coma ecliptic, después de haber trascendido y alcanzado diferentes planos y niveles de conciencia, volvemos a la Tierra, a este plano material en el que inevitablemente, estamos condenados a la horca. La muerte es inevitable, pero de nosotros depende el enfoque y el sentido que le damos a nuestra vida. ¡Depende de nosotros alcanzar la libertad y brillar o … ser un autómata más!
Una de las bandas más brutales de los últimos años. Hardcore progresivo, de lejos una de las bandas más virtuosas y prolíficas del planeta. Este EP, es una brutalidad, por momentos es extremo, es brutal, pero tiene momentos realmente brillantes en los que se puede apreciar el talento y genialidad de estos excepcionales músicos.
Cadaver – D.G.A.F (EP) / Edder and bile (2020)
Cadaver – D.G.A.F. (EP)
Cadaver – Edder and bile (2020)
Ésta es una de las bandas pioneras del death metal noruego. El … In pains del 92, ya era un disco raro, esa transición entre el thrash y el death, pero además con varios elementos medio progresivos. Los siguientes discos, van en una onda más death thrash clásico y contaron con la participación de integrantes de Aurora Noir.
Estos discos que les presento, ya corresponden a la última etapa de Cadaver, los dos lanzados el mismo año. Niddo (Anders Odden), es toda una institución dentro de la escena de su país y no por nada es actualmente bajista en vivo de Satyricon. En estos dos trabajos, la banda está conformada por Anders y por Dirk Verbeuren (Megadeth) en la batería.
El D.G.A.F., es un EP y va más en la onda del death gore más clásico, con claros guiños a Carcass, y no por nada en la canción homónima, cuenta con la participación de Jeff Walker en las voces. Este trabajo es visceralidad y brutalidad.
Por su parte, el Edder and bile, es un death metal más brutal y crudo. No sé si vale el término, pero es un más malvado. La bata de Verbeuren, es una ametralladora. Pura brutalidad, pero dentro de todo a este trabajo le siento mucha influencia del nuevo sonido de Carcass.
Death – Leprosy (1988)
Death – Leprosy (1988)
Posiblemente el disco que más escuche en el año. Este es uno de los discos seminales del Death metal de Florida y del death metal en general. Creo que a estas alturas, ya es hasta redundante hablar sobre el Chuck Schuldiner y su legado. Solo diré que este es un gran disco, es brutal, es crudo, muy visceral y para su época, extremadamente técnico.
Desde el principio, cada disco de death es diferente al anterior, es una evolución constante y además cada disco tiene su propio line-up. Para este disco, Chuck era acompañado por Rick Rozz en las violas, Bill Andrews en la bata y en el bajo Terry Butler.
Down – III: Over the under (2007)
Down – III: Over the under (2007)
Con el tiempo me he convertido en fan de esta banda. Como siempre decimos aquí en el Abismo, le tenemos tanto cariño al Phil, que ya es como “un chango más”. El line-up es clásico, el Phil en las voces, Pepper y Kirk en las violas, Rex en el bajo y Jimmy Bower en la bata. Yo soy gran amante del NOLA, pero este es otro gran disco. En cierta manera, me parece que musicalmente es más amplio, fluye de diferente manera. Posiblemente es más pesado y a la vez, tiene un feeling más duro, más nostálgico tal vez. Rock sureño no más, y por tanto tiene violas mucho más bluseras que los anteriores discos y eso se nota mucho más en los solos. Un disco más introspectivo talvez. Tal vez incluso tiene un aire más tirado a Zeppelin.
Eyehategod – Take as need for pain (1993)
Eyehategod – Take as need for pain (1993)
Esta es otra banda a la que le fui ganando aprecio con los años. Posiblemente esta, Soilent Green y Crowbar sean los precursores del Sludge o metal sureño. Down vendría después. Este disco es una cosa bien tripeada, yo en su momento no lo entendía, ahora después de muchos años, me doy cuenta que este disco es a su manera, fundacional en el género y de lejos, muy vanguardista por no decir experimental.
Es curioso, ahora que lo escucho, le encuentro muchas cosas del antiguo Nirvana, el de la época del Bleach. Este disco es Sludge y tiene ese riff cadencioso, doom sureño, pero tiene esas cosas medio punkeras que me recuerdan a Nirvana o Melvins, no es extraño, después de todo, son parte de una misma época.
Napalm Death – Utopia banished (1992)
Napalm Death – Utopia banished (1992)
Este es el primer disco con la formación clásica Greenway, Embury, Mitch Harris, Jesse Pintado y el recién llegado Danny Herrera. Dos ingleses, dos gringos y un mexicano, una combinación extrema. La bata del Danny Herrera es una locura, súper intenso y el bajo del Shane, crean una barrera sónica, es como si estuvieras en una tormenta. ¡Tiembla! A comparación del Harmony Corruption (1990), este disco es un grindcore más moderno. La violencia, sigue siendo la misma, por momentos es más pesado, pero con un feeling más groove. Desde ya, este disco tiene cosas raras como la Contemptuous, un adelanto de lo que vendría en el Diatribes.
Pig Destroyer – The octagonal stairway (2020)
Pig Destroyer – The octagonal stairway (2020)
Esta es una banda que escucho con bastante frecuencia. Es una banda brutal, grindcore de lo más hostil. Con el tiempo, su sonido ha ido evolucionando, pero siempre dentro de los parámetros de la banda. Este disco, en super intenso, es duro, pero a su vez tiene mucho de Groove, así que es un disco que te agarra y te tiene en movimiento, es mucha rockeada.
Lo interesante de este disco, son las partes ambientales. El viaje ya viene desde atrás, al Scott Hull siempre le han gustado las partes tripeadas, muestra de ello, Agoraphobic Nosebleed y algunos discos de Pig como el Natasha. Para este disco cuentan con un nuevo bajista y con un nuevo miembro que se hace cargo de toda la parte de sintetizadores. Y claro, él y Hull se han encargado de montar algunas pistas realmente colgadas, prácticamente drone, pero súper oscuro. Los últimos tres temas, son una sola colgadera, pero de alto nivel, otra experiencia sonora. Y ojo con la Sound Walker, que cuenta con la colaboración de Igor Cavalera en la programación y sonidos.
Rex Brown – Smoke on this… (2017)
Rex Brown – Smoke on this (2017)
Hace unos meses empecé a leer el “Official Truth: 101 Proof”, la biografía de Rex Brown y bueno, una cosa lleva a la otra, terminé enganchándome con este disco. Para melómanos y además fanáticos de Pantera como yo, resulto una experiencia increíble leer este libro. Su visión, sobre los acontecimientos que determinaron la vida y el éxito de Pantera y la caída, que terminó con la muerte de Dimebag Darrell. La historia de unos amigos, hermanos del alma, brothers, que tenían una banda que se llamaba Pantera.
Pero volviendo a lo nuestro, no esperen encontrar brutalidad. Este disco no tiene nada que ver con Pantera. En cierta manera, es todo lo contrario. Es simplemente rock sureño. Tiene, además, un aire medio hardrock alternativo. Lo interesante, aparte de que el bajo suena como una aplanadora, resulta alucinante escuchar cantar al Rex. Un disco en cierta manera introspectivo, que vale la pena escuchar.
Satyricon – Satyricon & Munch (2022)
Satyricon – Satyricon & Munch (2022)
Este disco surge como una colaboración de la banda con el Munch Museum de Oslo. La música era parte de una exposición de la obra del pintor noruego Edvard Munch. No sé si estrictamente es posible hablar de un disco de Satyricon o mas bien, de un proyecto del Satyr (Sigurd Wongraven). Musicalmente, es una cuestión bien compleja, se trata de un solo tema de casi 56 minutos, sin ninguna pausa; son temas interconectados por pasajes musicales que sirven a modo de transición entre un tema “cuadro” y otro.
En esencia, se siente una atmosfera triste, melancólica, oscura… Noruega. Musicalmente, el disco es muy electrónico y ambiental, hasta medio industrial, que incluso llega a ser medio drone. De tanto en tanto, escuchamos guiños de música clásica con chelos y guitarras acústicas, melodías, tradicionales me imagino, que recuerdan mucho al Dark Medieval Times. Hay también pasajes más sobrios, son guitarras que si bien, no llegan a explotar, tienen unos riffs característicos en los que te das cuenta que están tocando black metal.
La verdad es que en lo personal, este es uno de mis discos favoritos de Satyricon. El Fjelltronen (1995) de Wongraven, ya tiene mucha de esta onda, aunque tiene un enfoque más pagano. En cierta manera esta obra es algo así como una banda sonora, y en ese sentido, se acerca, o me recuerda mucho a trabajos antiguos de Ulver como el Teaching in silence. Un trabajo muy interesante, que de verdad vale la pena explorar.
Slayer – South of heaven (1988)
Slayer – South of heaven (1988)
No podría precisar en qué momento del año, ni por qué razón me conecte nuevamente con Slayer. El primer disco en el que ficharon para Def Jam Records, y que además fue producido por Rick Rubin, un productor que, hasta ese momento, no tenía ninguna experiencia de trabajo con bandas de metal. Lo cierto es que este disco es una obra maestra dentro del Thrash metal. De principio a fin es una sola rotura.
Este disco es la cara opuesta del Reign in blood (1986), si bien perdió en rapidez, ganó más en consistencia y en solidez. Los riffs del Kerry y del Jeff no son veloces, pero por el contrario son más duros y pesados. El nivel del Lombardo es impresionante, y en cierta manera, es el alma del disco y la parte vocal del Tom, es otra de las cosas que hace diferente a este disco, basta con escuchar la Read between the lies. Y por si fuera poco, este disco incluye un cover de Judas Priest, la Dissident Agressor.
Voivod – Voivod (2003)
Voivod – Voivod (2003)
El último disco con el Piggy (Denis D’Amour) como violero; además un disco en el que ya no participa Blacky (Jean-Yves Thériault) y como remplazante tenemos, nada más y nada menos que al Jason Newsted. En muchas cosas, es el disco más alternativo de su discografía, pero que esto nos los confunda, sigue siendo el mismo Voivod de siempre.
Este disco, es un cuestionamiento al mundo moderno en el que vivimos, a esa sociedad cada vez más vacía, con nuestros hábitos de consumo que nos están llevando a degradar nuestro planeta. La ciencia, mal utilizada al servicio de transnacionales que están exterminando todas las formas de vida y que en algún momento nos van a llevar a una catástrofe global.
Y que jodido, que sea precisamente Canadá, uno de los países que ha mantenido internacionalmente el discurso, de ser un país respetuoso con el los derechos humanos y el medio ambiente, y por el otro, que sus empresas mineras estén vinculadas al extractivismo voraz en toda Latinoamérica y a violaciones sistemáticas a lo largo del Continente. ¿Qué responsabilidad tienen estos países en la crisis ambiental en la que estamos viviendo?
Será el Multiverso, las diferentes realidades que conviven en un mismo plano de tiempo, pero en espacios diferentes. Diferentes preocupaciones y realidades. Así de complejo es nuestro mundo.
