Review: Hellfest 2023 – Edición XVI

La XVI edición del Hellfest fue, nuevamente, una gran celebración a la cultura metalera. En junio pasado y durante los ya oficiales cuatro días, un sinnúmero de reconocidas bandas, especialmente muchas de la escena underground, se dieron cita junto a cada vez más visitantes en un espacio recientemente expandido, lleno de novedades y sobretodo con mucha pasión por la música.

The Sanctuary, nueva tienda de mercadería del Hellfest

Aún cuando pareciera que 12 meses es mucho tiempo, ¡pasan volando! y una nueva edición del Hellfest nos esperaba a la vuelta de la esquina. Este año Andi y yo, nos fuimos directo el primer día que abre la zona para acampar, en este caso el miércoles 14 de junio. Nos arriesgamos a llegar un poco tarde aunque ya había visto gente en los trenes con sus manillas, y efectivamente los franceses tienen la ventaja de recibirlas previamente por correo, entonces aunque llegamos pasadas las 4 pm (generalmente abren las puertas a las 2 pm) ¡no había cola! Por suerte evitamos una prolongada insolación porque el sol ya penetraba con todo. Luego de la instalada de carpa y la tradicional visita al supermercado ELeclerc, allí ya resonaban las bandas del pequeño festival en el estacionamiento del enorme edificio. Al volver nos encontramos con nuestro amigo y colaborador Gabriel.

Clisson

Por la noche visitamos juntos el área de la entrada principal al festival, la Hell City Square, y me vine a enterar que es casi una copia fiel del barrio Camden de Londres. Como es costumbre, se puede visitar el Metal Market allí mismo y donde siempre hay alguna cosa interesante. Por cierto gran parte de toda la infraestructura del festival se puede visitar durante el año. Camino al campamento, denominado Metal Corner, la atracción de este año fue un gigante trampolín de cual uno podía salir disparado aunque sujetado a unas cuerdas se seguridad (ver foto al final), así que de cuando en cuando se escuchaba gritar a alguien ahí en las alturas, pena que no había el golpe al mazo del año pasado, era muy chistoso.

Era hora de descansar porque los siguientes cuatro días serían muy intensos, lo sabía de sobremanera… aunque llegado el momento hay un cargo de conciencia hasta de tomar un descanso porque sabes que podrías estar viendo alguna banda…

Estatua a Lemmy Kilmister en el área entre el Warzone y el nuevo Valley

Día I – Jueves 15 de Junio

Entrada exterior al festival, ojo con cartelitos

La primera jornada sería una de mis favoritas aunque solo sería un medio día de conciertos, habían muchas bandas que quería ver y estuve desde la primera que tocó hasta la última. Aprovechamos la mañana para visitar la bella y pequeña Clisson, esta no es solo una vacación llena de música sino también de hospitalidad, por donde uno camine encuentra metaleros sonrientes que tienen las mismas expectativas, más aún cuando de casualidad encuentras a alguien con la misma polera y que te saluda por llevarla. A la par también, de los agradables lugareños que ven en este tumulto una gran oportunidad comercial. Los conciertos empezaban a media tarde así que había tiempo de pasear por las angostas y verdes callecitas, los alrededores del castillo (ver foto Château de Clisson al final) o la rivera del río Moine.

Gigantesco cráneo frente a la entrada

Por cierto en la entrada exterior del festival, habían personas con su cartelito (ver foto aquí) que buscaban aún entradas, obviamente por las distancias e inversión no cualquiera puede ir a probar suerte allí. Esa fue la antesala al festival y descubrir las novedades. Este año, el área se expandió (ver nuevo mapa aquí) y sobresalía la imponente nueva estructura de la tienda oficial de merch del festival, denominada The Sanctuary (foto de portada), que se sitúa directo a la derecha de la entrada, en el antiguo lugar del escenario Valley. Inspirada en el trabajo del reconocido artista suizo HR Giger, este tipo de templo romano, fue una atracción inmediata. En anteriores años, había una interminable cola que cruzaba una gran parte del área del festival, ahora esta ¡se dividía en varias! Al menos los primeros días, eran colas y colas interminables, era un sacrificio para el que quería comprar algo porque se perdía al menos una banda en la travesía esa. El último día entramos porque las colas se habían reducido, así como la cantidad de artículos que ofrecían, muchos agotados.

Nuevas instalaciones del Valley

Y el container que antes funcionaba como la tienda del merch, ahí en medio del área del festival, ahora es un bar donde venden jugos o bebidas sin alcohol, no sorprendía porque no habían colas ahi. No menos imponente, es el nuevo y gigantesco cráneo en frente de la entrada (ver foto aquí) y lo primero que ven los visitantes, al entrar. Un lugar muy concurrido para la típica selfie y que al tener una superficie completamente metálica, sobresalía sin importa la hora o el clima. Y si el Valley había desaparecido de su habitual lugar, ahora hay que caminar por el costado izquierdo del Kingdom de Muscadet y doblar a la izquierda, queda al otro lado del escenario Warzone. Este nuevo espacio es más amplio y al aire libre, atrás quedó la carpa, tiene sus propio bar, lugares de comida por la parte trasera, baños y espacio para comer o descansar.

Charon – Rueda de Caronte

A manera de estrenar este nuevo espacio, este año contaba con la exposición de Charon (Rueda de Caronte) de Peter Hudson, una gigantesca rueda giratoria de casi 10 metros con réplicas de esqueletos humanos montados en su borde interior y que funciona con un mínimo de 12 personas trabajando al unísono, mientras tiran de una serie de seis cuerdas que hacen que la rueda gire progresivamente más rápido (ver foto aquí). Cuando los que tiran de las cuerdas, coordinan lo suficiente para conseguir que la rueda gire a la velocidad correcta, se activa una luz estroboscópica que revela la animación de los esqueletos. En 2022, Les Machines de l’ile encargó el transporte de la obra, desde Estados Unidos hasta Nantes. Esta tenía planeado continuar su viaje durante ese año y 2023, a Londres, Amberes, Clisson (Hellfest) y París.

La animación cuenta la historia de Caronte, el mitológico gondolero y barquero del Hades que transportaba las almas de los recién fallecidos a través del río Estigia, el último derecho de paso hacia el más allá. Esta pieza se estrenó en el Burning Man de 2011.

Blackbraid

Ahora a lo que vinimos. Como siempre menciono, es importante tener el cronograma de las bandas (running order) porque llegado el momento, hay que decidir entre una u otra banda y a veces hasta dividirse para ver algo de más de una. Esto es algo frecuente en el Hellfest y lo sería desde el primer momento. Y ya que estábamos en el nuevo Valley, puntualmente empezaba la primera banda, los franceses de Hypno5e, quienes por cierto solo días antes anunciaron su presencia (tomaban el lugar de Celeste quienes por suerte tocarían más tarde). Aquí en el Abismo seguimos a la banda hace mucho tiempo, fusiona el progresivo con el post metal e incluso con uno de ellos nos une el sentimiento de haber crecido en Bolivia, aquí una reseña de un trabajo suyo con imágenes de este bello país.

Paralelamente tocaba la revelación de black metal Blackbraid, un atípico proyecto en solitario de las montañas del noreste de Nueva York, formado en 2022 e influenciado por sus raíces nativas americanas. Varios comentaron el éxito de la banda y como en solo un par de años llegaron directo al escenario Temple para abrirlo no solo ese día sino el festival en sí, aunque quizás esa aún poca experiencia en vivo, fue su derecho de piso en cuanto a sonido. Todo su show está disponible online y lo compartimos aquí.

Dvne

Ahí mismo llegaban, en este caso desde la ciudad, de Nueva York, Imperial Triumphant. Con su metal experimental muy buen logrado en sus álbumnes, en vivo es una banda visualmente interesante, con sus trajes y su botella de champagne, aunque creo que su estilo avant garde se escucharía mejor en un lugar pequeño, al igual que cuando los vi en el Brutal Assault, con problemas para escucharlos claramente. En el Valley tocaba la leyenda del noise Today is the day, desde Tennessee. Su cabeza, Steve Austin, insiste incansablemente en que siempre elegiría la experimentación antes que el éxito comercial, aunque sus numerosos álbumes han influido a muchas y reconocidas bandas. Para el deguste de los interesados su presentación está disponible, se la puede ver aquí.

Un highlight personal fue ver a Dvne, unas de mis bandas favoritas de la escena actual. Recuerdo que cuando los vi en 2021, mi primer concierto luego de 17 terribles meses de cuarentena sin música en vivo, les dije ¿Y cuándo en el Hellfest?. La banda escocesa de post metal y sludge progresivo, llegó con suaves arpegios y enormes riffs de guitarra dispuestos a arrasarlo todo a su paso, así que verlos aquí fue simplemente genial, gran banda, intensidad total. Su presentación fue transmitida por el livestream de Arte en directo (la compartimos aquí), cabe mencionar que el canal francoalemán, y su sección Arte Concert transmitió varios shows en directo y otros posteriormente. Realizan un gran trabajo, este año incluso con el uso de imágenes de drones, aunque la mayoría de los videos solo están disponibles por un año, razón por la que sugiero verlos antes de que los bajen.

Celeste

Tenía curiosidad por ver un poco de Hollywood Vampires, así que a manera de un corto descanso los vi en el bar de la zona VIP. Allí tienen una pantalla que transmite los conciertos de los escenarios principales, una cómoda forma de disfrutar en tiempo real, lo que básicamente está pasando a uno cuentos metros. Sobre la banda, creo que más que nada era el hype de ver a Johnny Depp tocando en vivo de nuevo, luego de todo lo que le pasó y demás. Banda de rock con Alice Cooper y Joe Perry (Aerosmith), y como no soy muy fan de las bandas tributos vi un par de temas y me fui al Altar a ver un poco de los grandes Candlemass. Los suecos pioneros del epic doom metal, como siempre muy sólidos, aunque bueno es una banda fija en los festivales así que se los ve seguido, cerraron con el himno Solitude. Había que correr al Valley para ver a Celeste, por suerte tocaron un poco más tarde porque ahora que este escenario es abierto pues la magia de la banda se hubiera visto un poco perjudicada por el potente sol, por obvias razones (ver foto al final). Los franceses han logrado una gran combinación ente post harcore, black metal y sludge.

Hypocrisy

Ya empezaba la hora pico del día, por donde uno veía había gente, estaba acostumbrada a que este lleno pero habían escenarios en donde hasta muy detrás estaban llenos. Había que buscarse modos de encontrar un lugarcito para disfrutar. Para esa hora tocaba en el Altar, Hypocrisy, no es muy frecuente verlos, así que se disfruta de sobremanera ver al señor Tägtgren y la banda, tocando temas claves de su fructífera discografía, empezaron con Fractured Millenium y ya no había forma de moverse de ahí, muy sólidos, ¡una brutalidad!. Una pasadita por uno de los dos escenarios principales, el Mainstage 1 para ver en las pantallas aunque sea un poco de lejos pero con un sonido potente a los archifamosos de Kiss en esta su última gira, como siempre ¡gran producción!, un show impresionante la verdad, me quedé un par de temas, repito que nunca fui fan así que seguí rumbo al Valley.

Amenra

El show de Amenra creo fue un highlight para mucha gente, los belgas continúan haciendo añicos las almas con sus canciones catárticas, empezaron con Boden. Mezclando el arte visual con una intensidad desgarradora, sus presentaciones en vivo tienen ya la fama de ser citas ineludibles. Es una gran banda, aunque cuando los has visto varias veces ya sabes de que se trata, por lo que si nunca los has visto y puedes hacerlo ¡no lo dudes! Yo quedé impresionada luego de ver el video que Arte transmitió en vivo (y compartimos aquí) con impresionantes tomas aéreas de dron, por cierto recuerdo que de rato en rato lo veía moviéndose por ahí, logrando incluso que la banda pueda transmitir esa intensidad, en blanco y negro.

Para finalizar este increíble y extenuante día, cerraría con Katatonia en el Altar. Mientras llegaba allá, se percibía aún la mega multitud para Behemoth, que había acabado de tocar a lado. Creo que influye también el status de celebrity que tiene el Nergal, hace años que los veo solo de pasada, esta vez hubiera sido casi imposible, muy lleno. Volviendo a Katatonia, estuvo muy bueno, aunque Blackheim no estaba, ¿será que esta fuera de? … oficialmente no pero se puede dudar. Tocaron con un solo guitarrista (Dyngwie Elgstrand, ex Entombed), varios temas de su nuevo álbum, algunos clásicos del TGCD y si disfruté de su show como no lo hacía hace mucho. Un año antes me fui a medio set, eran los temas de siempre, casi sin interacción con el público, muy flojo. Está vez Jonas estaba más relajado, jovial e incluso divertido contando un par de anécdotas, para cerrar tocaron Evidence del Viva Emptiness y ahí me ganaron.

Kiss

Día II – Viernes 16 de Junio

Full of Hell

Fue tan intenso el primer día que me sentía con chaki musical, me hubiera gustado ver a Hetroertzen pero deliraba en mis sueños aún. Apenas llegué al Valley, pasado el medio día para la segunda banda, Helms Alee, que deseaba ver hace mucho. Trío compuesto por dos chicas, una de ellas en la batería y donde todos cantan. Desde Seattle, trayendo su fusión de post hardcore, noise y sludge, muy bien para empezar el día, buen sonido e intenso (ver foto final). Un rato más tarde, ahí mismo nos juntamos con Gabriel para ver Primitive Man desde Denver, otro trío que combina el noise con black y funeral doom, intensos aunque mucha luz para esas notas.

Bongripper

Deseaba volver a ver a Full of Hell, la banda de Marylando se ha vuelto muy conocida en el circuito del grindcore actual, tocaban en el Altar y este escenario los elevó a comparación de la primera vez que los vi. En una banda muy cohesionada a pesar del caos, ese vocalista Dylan Walker ¡es un liso!, gran banda. Y si intensidad hablamos, llegaba la hora de los poderosos Bongripper, una de mis bandas favoritas. Y como son escasas sus escapadas desde Chicago para tocar en vivo, cada segundo de su set es muy apreciado. 45 minutos de un viaje de principio a fin, impulsado por el doom instrumental, un viaje en el que solo hay que dejarse llevar y donde cada nota se siente hasta la médula. Empezando con Hail del Satan Worshipping Doom y cerrando con Slow del Terminal, si dos temas jeje, ¡banda top!. Al menos esta segunda vez en el festival, tocaron un poco más tarde y más tiempo, como les decía luego a ellos ojalá la siguiente toquen una horita al menos y más tardecito.

Greg Puciato

Sabía que ese headbanging iba a cobrar factura, así que luego a manera de descansar me fui por el Mainstage 1 para ver de lejos algo de Skid Row, llegué para 18 and Life y me pareció bastante sólido, el vocalista por ese entonces Erik Grönwall, muy talentoso. A sugerencia del Sebas fui a Greg Pusciato, proyecto en solo del frontman de los desaparecidos The Dillinger Escape Plan, su estilo es una mezcla de noise con wave pop, medio raro pero no queda duda que tiene talento. Reconocí al guitarrista de Daughters y tocaron un cover de Alice in Chain y otro de su antigua banda, lo mejor del setlist jeje. Ahí empezaba la hora pico del día, mientras en el Altar reemplazaba Belphegor el slot de Bloodbath que tocarían más tarde, vi algo de Def Leppard, para así recordar algunos temas que escuchaba en mi temprana adolescencia. Músicos muy talentosos, un show visual muy bueno, aprovechando gigantes pantallas. Para un cambio radical, en el Temple tocaba Gorgoroth, creo que luego que el Gaahl salió ya no me llama la atención, poco show en comparación a lo que hacían hace 20 años.

Triggerfinger

Me fui a ver a los belgas de Triggerfinger, un genial trío de finales de los noventa, con un intenso y melódico stoner rock, cada miembro lo da todo y es inevitable no moverse a su ritmo, como el gran tema Colossus. Banda revelación en lo personal, aún con un cover de Rihana incluido. Bloodbath, por otro lado, curiosamente si lo tenía a Blackheim pero no a Jonas (¿se pelearon o qué?) a este último lo reemplaza Joakim Antman (bajista en Lik), disfruté un par de temas del Resurrection Through Carnage y del Nightmares Made Flesh. Mientras había que adelantar el paso en dirección al Mainstage 1.

Comentábamos que para aquellos que desean ver una banda lo más cerca al escenario, significa llegar mucho antes y peor aún para los escenarios principales. Por esta inversión de tiempo es que se pierde el ver a otras bandas y a manera de reducir esos sacrificios al mínimo, lo ideal es acomodarse atrás cerca de la consola, donde el sonido es casi siempre top. Así estábamos para el turno de Mötley Crüe, nunca los había visto en vivo. Empezaron con una intro pomposa, el Requiem in D minor, y de ahí no pararon con su artillería de hits durante 90 minutos. Incluidos temas como Shout at the Devil, Too Fast for Love, Live Wire, Home Sweet Home, Dr. Feelgood, Girls, Girls, Girls (con JP “Rook” Cappelletty como invitado).

Espectáculos de fuego en la entrada a Kingdom of Muscadet

Un gran show, un escenario lleno de luces, pantallas, bailarinas que cantan y gigantescas chicas inflables. Una banda que escuchaba de adolescente y cuyo line up original se impuso por todo el mundo con sus pegadizos temas, en la actualidad solo quedó fuera Mick Mars que fue reemplazado con el antiguo guitarrista de Marilyn Manson y Rob Zombie, John 5. Un show que disfruté mucho y me gusto incluso más que el de Guns ‘n Roses, sobretodo en la parte vocal.

Puede que en estos tiempos de excesiva “crítica” mediática, una banda como esta, podría no tener el mismo éxito que en los 80/90 (como cuando Tommy Lee se levanta y todo eufórico grita ¿no beer, no tities? ), aunque eso si conservan aún una gran camada de fanáticos, ellos mismos mencionaron que volvían de una exitosa gira por Sudamérica. Lo único que no me gustó es que inviten al cuatesito ese llamado Machine Gun Kelly (cuya banda es la telonera del tour mundial) a cantar con ellos en The Dirt (Est. 1981), así como Oye vecino, ven, cantá. De esta manera, terminaba un segundo e intenso día, al ir a “casa” pasé por As I lay dying, llenisimo y solo logré ver por la pantalla que un “ropero” la cubría. Hoy valía la pena ir a dormir lo antes posible, el sábado es siempre el día más ajetreado…

Mötley Crüe

Día III -Sábado 17 de Junio

Rueda Gigante

Y así empezaba el tercer día, tampoco clasifiqué para la primera banda pero si para la segunda poco antes de medio día. Spirit Adrift en el Valley, banda que reside actualmente en Texas, fusiona el heavy metal con el doom, la conozco desde que salieron en los videos del Gwarsenio Hall de Two minutes to late night, la vi un par de veces en vivo y es una banda muy divertida.  De ahí me fui al Temple, inicialmente en ese puesto se supone debían tocar los ucranianos de White Ward pero por las restricciones a los artistas debido a la guerra, tuvieron que volver a cancelar. Intentaron de todo hasta dos semanas antes, una pena, ojalá puedan salir eventualmente, los sigo por sus redes y es también una forma de saber cómo esta la situación por allí. Los reemplazó la banda italiana de black death Hierophant, nada mal la verdad aunque quizás por la hora  y el sonido no se podía apreciarlos muy bien, de todas formas recomiendo escucharlos.

Svalbard

Crucé hasta el Mainstage 1 para ver a Enforcer, gran banda sueca de heavy speed antigua escuela que en vivo son bien sólidos y tienen una presencia imponente. Volví al Valley para ver a King Buffalo, el trío de Rochester, NY que fusiona el heavy blues rock con stoner y desert, muy psicodélico. Presentaba temas de su más reciente disco Regenerator de 2022, así como del gran The Burden of Restlessness, música para concentrarse y descansar, muy bueno en vivo. De ahí tocaba partirse, ver un rato a Crowbar y al gran Kirk Windstein, la banda de New Orleans sigue como una de las cabezas del movimiento sludge; de ahí tenía mucho interés de ver a Svalbard, la banda británica de post hardcore/metal que fusiona con varios otros elementos. Su líder, la guitarrista y vocalista Serena Cherry aprovechó los escasos momentos para conectarse con el público, como al presentar el tema Open Wound de su álbum When I Die, Will I Get Better? lanzado en 2020 y que habla de la depresión, ella comentaba que aún la padece pero si it gets better. Aunque el sonido no fue perfecto, vale la pena ver a esta banda.

Puscifer

Volviendo un rato al Mainstage 1 para ver a los polacos del metal/rock progresivo Riverside. Posterior, en el Temple tocaba el proyecto en solo del escoses Andy Marshall, Saor. Un black metal atmosférico y folk. Por fin pude “ver” a Puscifer en vivo, luego de que en 2016 tocaran paralelamente a Black Sabbath (!). Aquí la idea conceptual del último álbum Existential Reckoning es traída al escenario para crear toda una historia de aliens y agentes secretos. Aunque me hubiera gustado escuchar más temas del Money $hot, (tocaron The Remedy) un poco temprano para mi gusto. Y también ya muy lleno, había fans de Maiden como hongos, un poco chocante el asunto, lo que anunciaba que para cuando estos tocaran, iba a reventar el lugar.

El Warzone, vista desde la rueda gigante

En el Valley tocaba The Obsessed, que reemplazaban el spot de Stoned Jesus (misma historia de White Ward), quería ver al Wino y compañía porque finalmente podían volver a la EU luego de sus problemas, banda pionera del doom in Washington, D.C de finales de los 70, buen sonido y temas, aunque un poco flojo el show. Después tocaba Porcupine Tree, tuve que ver de lejos con la ayuda de una pantalla porque ya había muuucha más gente para Iron Maiden, apenas se veía al Steven Wilson. Ya era absurda la cantidad de gente, muchos durmiendo en el pastito mientras algunos pasaban por encima pisándolos, por eso me hubiera gustado que toquen más tarde porque por la hora y el lugar no se pudo disfrutar del todo, aunque eso sino, sonido perfecto. Al menos tuve la posibilidad de ver a Wilson más de cerca cuando salía de la conferencia de prensa, todo un personaje, muy introvertido al parecer.

El Altar desde la rueda gigante

Entre la muchedumbre me hice espacio para llegar a ver algo de Earthless, el trío instrumental de rock stoner psicodélico de San Diego, California. Unos capos totales como siempre, perfecto para relajarse un poco y olvidar el caos del otro lado. Ya se acercaba el momento de la noche, decimos subir a la rueda gigante (por suerte la cola no era muy larga) para aprovechar la hora azul y ver así punto alto del festival, las fotos son un claro ejemplo. Sin duda Iron Maiden es una de las bandas más grandes que hay y ese fanatismo es muy singular, un show de dos horas con más de una docena de himnos. Es tan genial que Dickinson hable francés fluido, que introdujo varios monólogos de por medio. Fue un momento oportuno para admirar a esa masa gigante de gente, no solo viendo a los ingleses sino también Monster Magnet en el Valley, Faun en el Temple, Lorna Shore en el Altar, todos a full mientras en el Warzone se prepara algo que personalmente esperaba hace mucho.

Black Flag

Otro de mis highlights fue ver Black Flag, la leyenda del punk rock formada a mediados de los 70 en Hermosa Beach, California. Liderada por el gran Greg Ginn, el guitarrista original, compositor principal y el único miembro constante en la banda. No estaba muy lleno, así que se podía disfrutar de la banda como en los clásicos No Values, Gimmie Gimmie Gimmie, Six Pack ¡brutal!. Al frente en el Valley empezaba The Clutch que estaba llenísimo, vi un poco porque había que caminar en dirección al Mainstage 1. Ya había muchísima gente para The Hu, la revelación mundial que llegaba desde Mongolia, aunque concuerdo con Gabriel de que es medio monótono, no deja de ser interesante todos aquellos detalles que traen, fusionan hábilmente instrumentos tradicionales como el morin juur con riffs de guitarra eléctrica y el uso del Khöömii, el canto de armónicos tradicional de Mongolia que permite al cantante producir múltiples tonos armónicos simultáneamente. El video que lanzó Arte lo compartimos aquí

Carpenter Brut (ft. Matt McNerney)

Quería un buen lugar para disfrutar de Carpenter Brut, así que había que adelantarse pasar por los fans de Within Temptation y posicionarse, un poco lejos pero con buena vista. La banda de Frank Hueso traía un set de más de 70 minutos con su atronadora mezcla de synthwave y metal, un encuentro con una veintena de temas, éxitos como Roller Mobster, Color Me Blood, Hairspray Hurricane o mi favorito Day Stalker: e incluyó la participación de varios y reconocidos invitados con los que Hueso realizó colaboraciones: The Widow Maker con Alex Westaway (Gunship, Fightstar), Beware the Beast con Matt McNerney (Grave Pleasures, Hexvessel, Beastmilk), Imaginary Fire con Greg Puciato (The Dillinger Escape Plan), Leather Terror con Johannes Andersson (Tribulation) y el clásico de todos los tiempos, cover de Michael Sembello, Maniac, con los músicos franceses Yann Ligner y Persha, con ella también presente en Lipstick Masquerade. Así, el escenario principal (hace unos años tocó como cabecera en una de las carpas) se convirtió en una gigantesca discoteca gótica (con esfera incluida para esas proporciones). Sencillamente un show impresionante, que se puede aún disfrutar aquí.

Iron Maiden desde la Rueda

Día IV – Domingo 18 de Junio

Zona VIP y prensa en la tormenta

Mientras el cuerpo pedía un descanso, la mente por el contrario se preparaba para la última jornada de esta travesía y para volverla más dramática, el cielo se cayó. Ya temprano estaba nublado, era el turno de los belgas de Wolvennest como segunda banda en el Valley, otra que merecía llegar aquí y ¡qué suerte tuvieron con el clima! aunque a esa hora de la mañana estaba aún un poco caliente. Una banda que fusiona el black metal de manera psicodélica, y como a medio show empezó a llover, su música tuvo ese dramatismo y atmósfera, fue genial aún cuando hayan sido solo 30 minutos, lo dieron todo. Paralelamente tocaba Strigoi, lástima que me los perdí pero había prioridades. Seguía lloviendo, no tenia chamara e ir al Mainstage 1 para ver Ho99o9 (el dúo norteamericano de punk rap) no era una opción así que me quedé en el Temple para ver The Old Dead Tree, banda francesa de dark rock/gothic metal con influencias progresivas ¡qué buena banda en vivo!

Wolvennest

Seguidamente tocaba Evil Invaders, la banda belga de thrash/speed metal. Un buen performance, gran show, incluso para las 2 pm su show tenía mucha parafernalia: fuego, cuchillos, etc. Tuve que aprovechar para abrigarme porque seguía lloviendo. Quería volver para ver Vektor aunque como tocaban bajo techo, estaba muy lleno y los vi de lejos. La banda de Tampa de thrash metal progresivo tiene músicos muy sólidos en vivo aunque el sonido fue un poco flojo. Mientras la llovía continuaba pero ya no con tanta intensidad, me decidía entre ver a Dozer, que volvía al festival, pero empecé a escuchar el primer tema de la banda She Past Away en el Temple y me quedé, un dúo turco de post punk que me gustó mucho.

The Old Dead Tree

Después en el mismo escenario tocaba Grave Pleasures, presentando temas de su nuevo disco y uno que otro hit pasado, paralelamente tocaba Mutoid Man en el Valley, y es una banda tan buena en vivo que había que verla, los vi en Brutal Assault hace años, ahora en un escenario más grande, gran banda. Cabe mencionar que durante el festival hay también conciertos en el Hell City Square, por donde pasé un par de veces. Ahí se encuentra el escenario Hellstage, donde la mayoría de bandas que tocan son francesas. Vimos un poco de Black Mantra de melodic hardcore punk y Les Vulves Assassines, trio de chicas y un divertido techno punk (¡Das Kapital!).

Ubicada más adelante, me hubiera gustado ver a Benediction, pero los escuché de lejos, estaba muy lleno para variar, eso si como siempre bien sólidos, es una gran banda. Por suerte hay video de esa presentación, compartido aquí. Me fui de vuelta al Valley, para ver a Dance with the dead, que es una duo de California de la misma escuela que Carpenter Brut y Perturbator. Me gustó, música bailable para disfrutar mientras salía el sol e inmediatamente después llovía.

Dance with the dead

Poco antes que termine, había ya que moverse rumbo al Mainstage 2 para conseguir un lugar decente y ver la banda que esperé toda mi vida, estaba ya tocando Tenacius D que es el duo de rock de Los Angeles formado a mediados de los 90, por los actores Jack Black y Kyle Gass, muy chistoso la verdad. Esta era la antesala para unas de las bandas que definen mis inicios en el metal, Pantera será siempre una de mis bandas favoritas, pioneros del groove metal.

Eran las 9 pm y estaba el cielo aún claro, el lugar desbordaba gente y no solo era eso, era complicado caminar por el barro, al principio apenas veía la parte alta de las pantallas. Intentar llegar más adelante hubiera sido un suicidio y quería disfrutar, no morir en el intento. Aunque muchos digan que es una banda tributo para mi es al menos 50% Pantera original y más de eso en esta vida no se puede conseguir, así que es lo que es. Zack Wild y Charlie Benante son muy buenos, ya sé que no son los hermanos Abbott pero tampoco tienen la intención de reemplazarlos, es más bien un gran homenaje el que les hacen. Cuando Phil preguntó cuántos de los presentes habían visto a Pantera en los 90, fueron varias las manos que se alzaron. Eso es haber tenido la suerte de ver el line up original, pocas bandas son tan brutales y donde cada miembro complementa con el mismo peso, el sonido de la banda.

Ver al Rex y al Phil, en la banda que los llevó a la cima de la escena, fue muy emotivo. Cada tema del setlist me llevó a una montaña rusa de recuerdos, es increíble como la música funciona en el cerebro y guarda muchas de esas experiencias intactas, a pesar de los años. Así tema tras tema, a cual más brutal mientras cada vez el headbanging era más intenso y aprovechaba un descanso para corear alguno: empezando con Regular People (Conceit) como música de fondo, mientras mostraban imágenes en la gigantes pantallas de sus famosos home videos, ¡como olvidarlos! A continuación, otra canción a manera de intro para que el telón caiga y empiecen las notas del poderoso A New LevelMouth for War, Strength Beyond Strength, Becoming, I’m Broken, Suicide Note Pt. II, 5 Minutes Alone, This Love, Yesterday Don’t Mean Shit, Cemetery Gates (intro y solo el primer verso con videos de los hermanos), Fucking Hostile, Walk (a la mitad del tema, miembros de The Skull ingresaron al escenario para acompañar en los coros), Domination/Hollow y para cerrar con Cowboys From Hell ¡qué gran concierto!.

Melvins

Y mientras terminaba un sueño hecho realidad, muchos se movían un poquito hacía la derecha para ver a Slipknot, yo corría para ver al menos la mitad del set de los grandes Melvins, la legendaria banda formada en Washington, pioneros en el desarrollo del grunge y el sludge. Como siempre increíble, es otra banda que hay que ver en vivo, ¡esa intensidad!. Hubiera sido complicado dividirse esa media hora si no hubiera cancelado Fields of the Niphilim, que debían tocar paralelo en el Temple pero fueron reemplazados por Paradise Lost, otra de mis bandas favorita pero una que es ya tradicional en los festivales. Luego crucé al frente, tenía interés en ver a The Ghost Inside desde Los Angeles, en el Warzone (los conozco por Martín), una banda de melodic hardcore/metalcore, con un sonido brutal, impresiona además ver al baterista tocar con una sola pierna.

Para finalizar el festival y el Altar, la leyenda viva de la Bay Area de San Francisco, Testament. Con un arsenal de hits, incluidos temas de los últimos álbumnes y clásicos como The New Order, Practice What You Preach, The Pale King entro otros. Durante The Formation of Damnation la banda preparó al aún entusiasta público para un wall of death, mientras la organización del festival alistaba los fuegos artificiales y así dar por terminado el festival a la media noche, y de la misma manera lo hacia la banda al son de Over The Wall e Into The Pit. ¡Gran show! Fue transmitido en vivo por arte y lo compartimos aquí.

Pantera

A manera de conclusiones, la organización comento que recibió 240 mil visitantes, supongo que es el total de todos los días, con un promedio de 60 mil, que representa como dos tercios de lo que es el Wacken. Todo el tiempo tuve la impresión de que estaba muy lleno, puede ser por el hecho de que este festival es más compacto. Si bien es verdad que va creciendo en espacio y público, este año era impresionante la cantidad de gente a horas pico en todos los escenarios, antes eso se veía de vez en cuando para determinadas bandas pero este año era cada día, imposible hacerse campo para ver algo adelante sin conseguir enemigos en el camino. Esto incluso preocupó y afectó a más de uno por los robos de celulares, en medio de los muy apretados mosh pits. Un punto que la organización debe mejorar. Viendo el lado positivo, siempre se puede descubrir muy buenas bandas en aquellos espacios no tan llenos.

Fuegos Artificiales – Clausura del festival – Vista desde fuera del Altar y luego de Testament

Lo otro fue que, al mejor estilo del festival alemán, no habían terminado los fuegos artificiales que ya anunciaron el festival del 2024 e incluso señalando que se vendería las entradas ¡una semana después! Hubo quejas de varios fans mencionando que muchos no tienen el dinero para luego de semejante gasto que implica asistir a uno, comprar una nueva entrada ¡en menos de una semana! Pero recuerdo que hasta hace unos años, el primer día había un stand en el Hell City Square donde vendían ya los boletos para el próximo año (me imagino que era una pequeña tanda porque el segundo día estaban ya agotados). Esta vez la venta fue abierta a todo el mundo, entonces supongo que es porque venderán más y podrán disponer de dinero para cerrar los tratos con los nuevos headliners, también podría pensar otras cosas pero lo dejo ahí. Lo otro es que este año fue para muchos muy difícil conseguir un ticket, como se centralizó la venta y reventa en una nueva página, el asunto se volvió más un juego de suerte. Más aún con la demandas que crece cada año.

Así termina otra edición para la historia, no queda más que confirmar, en poca palabras, que el Hellfest ES ¡el mejor festival! de la actualidad.

Château de Clisson

En las calles de Clisson

Hypno5e

Imperial Triumphant

Candlemass

Atracción en el Metal Corner

Helms Alee

Vreid

Gorgoroth

Delicias culinarias en la plaza de comidas

Enforcer

Riverside

Rueda de Caroente en movimiento

Saor

The Obsessed

Earthless

Muro en honor a los caídos, en el bar VIP

Evil Invaders

Vektor

Black Mantra

Colas en la entrada a The Sanctuary

Grave Pleasures

Mutoid Man

Espectáculo de fuego

Tenacious D

The Ghost Inside

¡Hasta la próxima!

Sobre Krups

Creadora del Abismo Blogzine y del Illimani Metal Fest, nació en La Paz y ahora radica en Alemania. Melómana y metalera desde hace 25 años, ingeniera de profesión. Aprovecha cada oportunidad para ver bandas en vivo, visitar nuevos lugares y para la fotografía.

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