Otro año más que se va. Las sensaciones que me deja son dentro de todo positivas. Productivo y de crecimiento en muchos aspectos. Para mí, el año de las “ideas”, un año que me sirvió para entender corrientes de pensamiento, movimientos y tendencias, muchas de las cuales se mantienen hasta el día de hoy. Construcciones ideológicas y sociales de las cuales, de manera inconsciente, somos parte. Y bueno, la música siempre como banda sonora de esta historia; la eterna compañía.
Un año con muchísima música. Para todos los gustos. Dentro de esa carpeta me ha costado un poco, tal vez más que otros años, elegir los discos que más me “movieron”. Al final es eso, “gustos”. Pero bueno, aquí les dejo la selección de los discos que para mí fueron lo más representativo de este año:
EPs:
Ehecatl – Rites of ascension Phase II (Independent)
El nombre de la banda, hace referencia a la mitología Mesoamericana al dios del viento, o el hálito de los seres vivos. Ya se imaginarán por donde va este disco. Prácticamente es un black atmosférico, que sin dificultad alguna confluye con el drone. Un disco para abstraerse.
Thou – Rhea Sylvia (Deathwish Inc.)
Provenientes de Louisiana, esta banda no deja de sorprenderme por su prolijidad. Este año nos presentaron un LP, un Split y tres EP, de los cuales este es uno de ellos. En general, la banda se mueve por las aguas pantanosas del sludge, el drone y el doom. Este EP en particular fue el que más me gusto, porque se aleja un poco del estándar de la banda. Por momentos le encuentro mucho del antiguo Atlas Moth. La Deepest sun debe ser el mejor tema, en el cual tiene una marcadísima influencia de Alice in Chains. Un EP que me recuerda a todo ese auge de bandas de Sludge de principios del 2010.
Nachtmystium – Resilient (Lupus Lounge)
Mucha gente estaba esperando este nuevo material. En los últimos años, el Blake Judd ha pasado por su propio infierno, de ser un ídolo a ser uno de los tipos más odiados de la escena. Tarde o temprano, su adicción iba a tener consecuencias. La “resiliencia” puede definirse como “la capacidad que tiene una persona para superar circunstancias traumáticas” y pareciera que esa es la actitud que tomó el Blake. Este no es el mejor EP del año, pero las cuatro canciones que lo conforman, en conjunto funcionan muy bien: sólido y melódico. Después de tantos años, el Blake ha desarrollado un sonido propio, lo cual se nota al tiro en este EP. Su amor por el post-punk es evidente y pese a toda la oscuridad, le gusta bailar. Veremos con que nos sorprende el próximo año. Yo me mantengo firme… aún le tengo fe al Blake!!!
LPs:
15. Inexorum – Lore of the lakes (Independiente / Gilead Media)
Procedentes de Minnesota, el estado de los “Diez mil lagos”, la banda conformada por Matthew Kirkwold y Carl Skildum (ex Obsequiae), nos presenta un black metal melódico con algo de death metal. Puede que dentro de todo resulte un tanto genérico, pero el ambiente del disco es muy peculiar. Dentro de todo, es un disco pagano, incluso, por qué no decir místico.
14. Manes – Slow motion death sequence (Debemur Morti Productions)
Nunca fui gran seguidor de esta banda, pero este disco me agarró. Estos noruegos, fieles a su avant-garde, nos presentan un excelente disco. Posiblemente no es tan oscuro ni caótico como sus predecesores e incluso su sonido es mucho más digerible, pero pese a ello la calidad musical no afloja. Un poco melancólico eso sí, pero dentro de todo, un disco muy bien logrado.
13. Wolvhammer – The monuments of ash & bone (Blood Music)
El último trabajo de Jeff Wilson antes de dejar la banda para retomar Chrome Waves. Este disco, es de esa onda de USMB urbano y contemporáneo que todavía me emociona. Black sludge muy en la onda de Cobalt o Nachtmystium. El aporte vocal del Adam Clemans es digno de mencionar. Gran vocal, y gran disco!!!
12. Extremity – Coffin birth (20 Buck Spin)
Un disco que ya habíamos recomendado hace varios meses. Death metal de la vieja escuela. Duro, pesado, intenso y melódico como debe ser.
11. Wayfarer – World’s blood (Profound Lore Records)
Ya había comentado de este disco tiempo atrás. Procedentes de Denver, esta banda nos presenta un black atmosférico bien arraigado en el folk. Un disco melancólico, pero bien melódico y con cierto aire post. Un disco que vale la pena prestarle atención.
10. Chapel of Disease – …and as we have seen the storm, we have embraced the eye (Ván Records)
Este disco fue una de las revelaciones del año. No sé si podríamos hablar de Death rock, pero creo que es la mejor definición que encuentro para este disco. A diferencia sus anteriores trabajos de estos alemanes, que eran mucho más viscerales, este resulta ser harina de otro costal. Es un disco muy refinado, musicalmente hablando. Partiendo de estas voces corrosivas que recuerdan a los primeros años de Death o Pestilence; para terminar en esas violas que realmente nos dejan un testimonio de las influencias de estos tremendos violeros, influencias que van desde el rock clásico de los setenta, pasando por Mark Knopfler, Kiss, Maiden, Metallica, incluso Tom Morello. Un disco para disfrutar de principio a fin.
9. Split Cranium – I’m the devil and I’m OK (Ipecac Recordings)
Desde el nombre de la banda… Todo mal!!! Este año el Aaron Turner nos ha entregado tres “adobes sonoros”, dos con SUMAC y este tercero con los Split. Este disco resulta ser otra aproximación del Turner a la música extrema, específicamente a sus inicios punkeros. Y eso es este disco, es un punk-hardcore contemporáneo, con un aire experimental, como todo lo que hace el Turner (ojo que en este disco también hay algo de Noise y Drone). Se nota una clara evolución respecto al anterior disco, resulta evidente que los teclados a cargo de la Faith Coloccia le han dado otro color al sonido de la banda y la vibra del Nate Newton también le ha dado más frescura. Un disco para partirse el cráneo!!!
8. Ultha – The inextricable wandering (Century Media Records)
Estos alemanes nos presentan un black metal árido, nebuloso, incluso hasta medio celestial. Espacial yo creo que sería la palabra más acertada, pero hay algo de esoterismo en este disco, que le da un carisma diferente. Un balance perfecto entre ese black metal intenso y el ambient. Atmósferas que se van diluyendo y dan lugar a sonidos o estados diferentes. Uno de los discos de black que más he disfrutado este año.
7. Skeletonwitch – Devouring radiant light (Prosthetic Records)
Un disco diferente en la discografía de esta banda. Es bastante raro, y un poco difícil de etiquetar. Efectivamente existe un distanciamiento del thrash y un acercamiento más directo al black, pero pese a todo, el resultado final es un sonido muy peculiar, muy diferente al sonido estándar de la mayoría de las bandas contemporáneas. Daría la impresión que la banda en general, pero especialmente los violeros Scott Hedrick y Nate “N8 Feet Under” Garnette, se han soltado mucho más y el resultado de ello es una especie de black melódico, progresivo y hasta medio experimental. También es cierto que el nuevo vocal Adam Clemans, ha contribuido para que esta transición haya sido posible.
6. Deafheaven – Ordinary corrupt human love (Anti-)
El sol vuelve a brillar en San Francisco y Kerry McCoy y George Clarke nos entregan una joya, una vez más. Posiblemente DFHVN sea una de las bandas más representativas del post-black contemporáneo y con justa razón. Las atmósferas, ambientes y “layers” que va construyendo McCoy son realmente increíbles, por momentos deslumbrantes. Violas por demás emotivas, capaces de captar la magia y la luz del momento; violas que incluso nos recuerdan a esos riffs mas clásicos de Pink Floyd o incluso de los Beatles. La Honeycomb por sí sola, es una de las mejores canciones del año.
5. Judas Priest – Firepower (Columbia Records)
Una de las sorpresas del año. Mucho se especuló sobre este disco, la enfermedad del Tipton, el brillante aporte de Faulkner o la mano maestra oculta de Andy Sneap. Todo ello puede ser cierto, pero el resultado final fue un disco realmente brutal. Es increíble como a estas alturas de su carrera, el Rob Halford pueda seguir cantando como lo hace en este disco, ¡canta como los dioses!. Sigo pensando que este es el mejor disco de Judas, ¡en los últimos 20 años!
4. Alkaloid – Liquid anatomy (Season of Mist)
Es mas que seguro que si Yes habría intentado incursionar en el death metal, probablemente habría sonado como este disco. Este es uno de esos megaproyectos, que se dan cuando las estrellas se alinean y los portales se abren. Liderados por Morean en las guitarras y vocales, el proyecto cuenta con la participación de los ex – Obscura Christian Münzner y Hannes Grossmann, Linus Klausenitzer actual bajista de Obscura y Danny Tunker, guitarrista de Abhorrent. Música para abrir los portales que conducen a la locura… pronto se desatará Azagthoth, para devorar todas las dimensiones que pueden ser!
3. Between the Buried and Me – Automata II (Sumerian Records)
Un disco que cierra todo un ciclo conceptual para la banda. Después de pasar por una serie de estados de coma inducidos y de haber alcanzado diferentes niveles de conciencia y haber vislumbrado otras dimensiones, planos y perspectivas, concluimos en la única verdad para el hombre: “Estamos condenados a la horca”. Irremediablemente, tarde o temprano todos vamos a morir. Ese proceso de aceptación es el hilo conductor de este disco. BTBAM, es una banda a la que le sobra talento. Hoy por hoy fácilmente debe ser, sino la mejor, una de las mejores bandas de progresivo del planeta. Una locura de disco, un abanico de sensaciones, emociones y sonidos. Desde el hardcore, pasando por el swing, hasta el progre más caótico y pretencioso. Una joya!!!
2. Voivod – The wake (Century Media Records)
Estos canadienses no paran de seguir evolucionando. En lineas generales, la incorporación de Daniel “Chewy” Mongrain le ha hecho mucho bien a la banda, al igual que la incorporación de nuevo bajista Dominique Laroche. Los habituales siguen siendo los mismos, Denis “Snake” Bélanger y el Michel “Away” Langevin. Más progresivos y excéntricos que nunca. Sin embargo, en esta ocasión me daría la impresión que la batería tiene un tiempo medio obsesivo que se repite una y otra vez y lo mismos pasa con los riffs de la viola, lo que en general creo que causa una sensación de pesadez o de saturación. Pero ojo, esto es Voivod y cuando la música despega, despega y nos lanza a otra galaxia. Un discazo!
1. Tribulation – Down below (Century Media Records)
Cada vez soy más fan de esta banda, cada vez la disfruto más. Posiblemente su sonido se ha ido volviendo más digerible, pero en el fondo sigue manteniendo intacta su esencia. Además, que ya tienen un estilo y un sonido propio, claramente identificable. Tribulation es una banda oscura. Y este disco es eso, es una mezcla de death metal, con algo de ese rock oscuro y ocultista de los setenta, y además aderezado con todo ese imaginario gótico. Definitivamente, una joya de disco!!!
Bárbara tu lista querido Dieguex! Con algunas sorpresas y algunos discos que se veían venir como tu disco 1 del año… ya lo hablamos bastante… un discazo! y los que este año compartimos.
De ahí, de las sorpresas… el Ultha y el Inexorum, debo darles más
Y finalmente me gustó ver ahí a Between the Buried…, Judas, el Alkaloid, el Wolvhammer, el Manes y el Extremity (realmente discotes!!)
Un abrazo!!!
Gracias Machi!!!
Este año salieron muy buenos discos. De tu Top, me sorprendió que no haya entrado el Manes, que la verdad esta muy bueno.
El Inexorum lo escuchamos. Al Ultha dale, buen disco!!!
Un abrazo!!!
Está el Manes… en la lista no metal… jeje
Abrazo
Dieguex, compartimos discos intensos este año, ya me imagino la sesión que sería eso! jaja. Esos Thou sacaron tanto material en 2018 que se pasaron, qué lisos! Bien ver al Judas, como te comenté, no creo necesario comparar pero bueno es un buen disco para una banda que no muere y que en vivo es increíble! Hay varios discos que vi igual en otras listas, así que te estaré comentando. ¡Que tengas un año lleno de momentos tan intensos!
Densa tu lista Dieguex; Inexorum es una brutalidad. El Ultha, se me pasó de largo y a los Split Cranium no les he entrado bien, tengo que retomar ese disco
Gracias Machi, gracias Krupsky y gracias George!
Efectivamente Machi, habías incluido al Manes en los no metaleros!
Krupsky, compartimos varios, como siempre, creo que los esenciales. El Judas es gran disco!
Y George, recomendado el Split Cranium… si te entro el SUMAC, este te va a romper!!!
Un abrazo